Lausanne: Guía de supervivencia básica III

Vaya, qué rápido pasa el tiempo... Sin darnos cuenta ha llegado octubre y es casi seguro que la mayoría de los que tenéis una erasmus en Lausanne ya estéis por allí. Hora por tanto de entrar al trapo con la tercera y, en principio, última entrega de esta pequeña guía que es un placer para mí poder compartir con todos vosotros.

V. Comiendo en Lausanne: Que no solo de montañas vive el hombre
Los primeros días de mi estancia en Lausanne pasé buenos ratos dando vueltas por la ciudad tratando de localizar los servicios más básicos. Una de las cosas en las que reparé es que el concepto de tienda de ultramarinos allí apenas existe. Ni el de frutería, carnicería, pescadería... Por más vueltas que di no conseguí localizar ninguna tiendecita de barrio donde poder hacer la compra.

En lugar de eso en Lausanne hay dos cadenas principales de supermercados: Migros y Coop. Podréis encontrar un montón de locales de ambas y acabaréis haciendo allí la compra a diario. ¿Cuál de las dos es mejor? Personalmente me decanto por Migros. Pero cada una de las dos tiene sus ventajas e inconvenientes.

Un Migros y un Coop. Ninguna de las dos fotos son tiendas de Lausanne.

La ventaja de Coop es que la calidad de lo que te venden es ligeramente mejor que la de su competidora. Pero claro... también es un poco más cara. Coop tiene dos edificios grandes en el centro, "Coop City", en plan Tiendas El Corte Inglés donde podréis encontrar prácticamente de todo. Luego tiene una serie de tiendas normales distribuidas por toda la ciudad y finalmente los llamados Coop Pronto. Estas últimas son tiendas más pequeñas, más caras... Pero que tienen la ventaja de que abren hasta las diez de la noche mientras que las demás cierran en torno a las siete (los sábados, a las seis) de la tarde. Si un día os quedáis con el culo al aire serán vuestra alternativa.

Migros, como he dicho, tiene alimentos de una calidad ligeramente peor. Pero la principal baza con la que juega esta cadena es el precio. De normal venden más barato, y además cada tienda de Migros pone de oferta una serie determinada de productos que van variando de semana en semana. El truco aquí es que cada tienda pone de oferta productos distintos, de modo que con un poco de tiempo y algo de planificación semanal sería posible comer variado los siete días a un precio inmejorable. Las tiendas de Migros se dividen en tres grupos que se identifican por el número de Ms del establecimiento. Los de una sola M son los más pequeños y con menos productos pero para la compra básica de cada día cubren las necesidades perfectamente. Los MM son más escasos, tienen dos plantas, y la variedad de productos es mucho mayor. Finalmente en Bel-Air (entre Flon y Riponne) está el Migros de tres Ms en el centro comercial Métropole 2000. Pero claro, si vivís lejos del centro puede ser un engorro volver cargados con todas las bolsas hasta casa, así que en ese caso mejor dejarlo para las compras grandes de fin de semana.

Oh, y otra cosa... En ninguna de las dos cadenas de tiendas regalan las bolsas. O lleváis bolsas propias o tendréis que comprar allí unas bolsas de papel que, he de decir, son bastante resistentes. Yo, a base de ir olvidando coger bolsas antes de ir a hacer la compra, acumulé una colección bastante maja.

Por último siempre queda la opción de comprar los alimentos en los mercados que se instalan en las calles del centro (en la Rue du Marché, Calle del Mercado, por ejemplo) de la ciudad los fines de semana. El problema es que aunque son todo alimentos frescos y, supongo, de bastante mejor calidad que los de Coop o Migros, también cuestan un ojo de la cara!

VI. De fiesta: Quemando la noche lausanita
Para el final, pero no por ello menos importante, queda el por dónde salir en Lausanne. Reconozco que en los meses que pasé allí no salí excesivamente, pero alguna que otra noción podré daros al respecto del tema.

En primer lugar tenemos el Satellite, un local en plena EPFL. Sales de clase un día cualquiera, no tienes mucho que hacer después en casa, y no hay nada mejor que dejarse caer por este bar en medio de la universidad donde ponen música de lo más variada (y en general de buena calidad) y tienen unas cuantas paredes repletas de cómics que leer sin problemas. Por proximidad y ambiente es casi siempre uno de los sitios más frecuentados por los estudiantes.

Saliendo de Lausanne-Flon [1] a mano derecha, en la Place d'Europe, hay una buena colección de discotecas. Allí están la Mad y el Atelier Volant. A la primera, a pesar de tener bastante renombre, no llegué a entrar [2] y la segunda, en mi experiencia personal, no os la recomiendo. La entrada es bastante cara, unos 25 CHF, las copas salen por unos 12 ó 13CHF y el vodka era aguarrás puro. Definitivamente no sería mi elección de salir de fiesta por allí de nuevo. Haciendo esquina en el edificio antes del Migros está la sala Punk, un sitio realmente chulo con muy buena decoración, una música de club bastante decente (aunque las copas siguen siendo un poco malas... Un consejo: no pidáis vodka) y bastante buen ambiente.

También en Flon, pero en este caso justo debajo del Grand Pont, tenéis Le Romandie, un local metido en un arco donde muchos fines de semana tendréis sesiones de música electrónica y de vez en cuando también algún concierto de alguna banda de metal. Sólo estuve una vez pero reconozco que el local me dejó muy buen sabor de boca.

Le Romandie, vacío. No es grande, pero es muy chulo.

Y justo en frente de Le Romandie está D! [3]. Allí pudimos entrar en una ocasión porque hablando con un relaciones públicas le dijimos que éramos españoles y el hombre, que debía venir de pasar unos días en Ibiza, dijo "Coñe, españoles! Menudo fiestón traéis en el cuerpo! Ale, pase VIP para todos" así de buenas a primeras. Pero luego la discoteca no es mucho mejor de lo que podéis encontrar en cualquer sala madrileña tipo Dalai o similares (perdón a los no madrileños que lean esto pero mi conocimiento de las salas de fiesta de otros puntos de la geografía española ronda el nulo).

Si lo que pide el cuerpo es simplemente tomar una cerveza con los amigos hay un par de lugares muy recomendables. El primero está muy cerca de Le Romandie y se llama Les Brasseurs. Allí podréis pedir metros, jarras bien grandes o incluso tablas de cata con media docena de cervezas distintas a probar. El segundo es el Captain Cook, un bar con ambiente irlandés cerca de la catedral.

“Las cosas divertidas nunca acaban en …arium. las cosas divertidas acaban en …aberna, …olera o …erveza”

Y si finalmente os han dado las tantas de copa en copa, os han cerrado el local y todavía seguís con ganas de fiesta siempre está la Darling, que abre hasta las seis. El problema de esa sala es que es precisamente eso, el after al que va todo el mundo que sigue de fiesta a partir de las tres o las cuatro... Y se nota que alguno que otro va bastante pasado. Y la música tampoco es ninguna maravilla pero, como digo, es un sitio donde estar a partir de determinada hora en caso de tener todavía ganas de marcha!

Y bueno, en principio ese es todo el pescado vendido. Lausanne tiene más sitios a los que salir de fiesta, claro está (por ejemplo, el Bleu Lezard), pero esto es una guía de iniciación y queda en vuestra mano descubrir el resto de la ciudad de noche. Por ahora con esto concluye la Guía de supervivencia básica para Lausanne. Sin embargo, no descarto futuras ampliaciones fruto de la colaboración (ejem, ejem, guiño, guiño) de aquellos que hoy por hoy están disfrutando de unos meses de estancia en la preciosa ciudad suiza de Lausanne. Pasadlo bien y disfrutadlo!

[1] Ya sabéis, centro de la ciudad y del universo conocido

[2] Lodr, que ya anda por allí, me dice que el ambiente de la Mad está genial y es bastante friki, ambientado en Alien, así que si estáis por los alrededores tiene pinta de que puede merecer la pena. Ahora me arrepiento de no haber ido...

[3] D * C * B *A. Vale, ya paro. No he podido evitarlo.

En capítulos anteriores...
Lausanne: Guía de supervivencia básica I
Lausanne: Guía de supervivencia básica II

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